English Version
I'm Andrés, a 27-year-old Argentinian who has been battling chronic kidney disease since I was 10 months old. It all started with hemolytic uremic syndrome. At 4, I began peritoneal dialysis, and at 7, I received my first (cadaveric) transplant, which unfortunately only lasted 8 months.
Years of hemodialysis and multiple surgeries followed, until I received a second transplant from my father at the Hospital Garrahan when I was 11. This one also declined, and I returned to dialysis at 16. In June 2022, another glimmer of hope faded when my third transplant failed.
Twelve years of dialysis have shaped my life, limiting my dreams, such as traveling. Despite countless complications and limited options, I continue to fight for a fourth chance. THE KIDNEY PROJECT offers that ray of light at the end of the tunnel.
I firmly believe in the power of this project and its potential to change the lives of thousands. To all who can contribute, I urge you to join this cause. The bionic kidney represents a real hope for those of us who yearn for a more fulfilling and free life.
I am deeply grateful to those who take the time to listen to our story. Together, we can make this dream a reality.
Support this cause by donating to The Kidney Project.
Versión en Español
Soy Andrés, un argentino de 27 años que desde los 10 meses lucha contra la insuficiencia renal crónica, consecuencia de un síndrome urémico hemolítico. A los 4 años inicié diálisis peritoneal, y a los 7, mi primer trasplante (cadavérico), que lamentablemente duró solo 8 meses.
Tras años de hemodiálisis y múltiples cirugías, recibí un segundo trasplante de mi padre en el Hospital Garrahan, cuando tenía 11. Este también decayó, y a los 16 años volví a la diálisis. En junio de 2022, una nueva esperanza se desvaneció al fallar mi tercer trasplante.
Doce años de diálisis han marcado mi vida, limitando mis sueños, como el de viajar. A pesar de las múltiples complicaciones y la escasez de opciones, sigo luchando por una cuarta oportunidad. THE KIDNEY PROJECT me brinda esa luz al final del túnel.
Creo firmemente en el poder de este proyecto y en la posibilidad de cambiar la vida de miles de personas. A todos los que pueden colaborar, los invito a unirse a esta causa. El riñón biónico representa una esperanza real para quienes, como yo, anhelamos una vida más plena y libre.
Agradezco de corazón a quienes se toman el tiempo de escuchar nuestra historia. Juntos podemos hacer realidad este sueño.
Ayuda a esta causa donando a The Kidney Project.
